miércoles, 13 de febrero de 2008

The Persuit of Happiness*


Recuerdo haber dicho hace algún tiempo que estaba decepcionada de muchas cosas, que la felicidad era sólo un estado efímero, que pasa y nos deja con nada más que recuerdos... Y bueno, creo que es verdad, pero hoy me siento feliz, y no me queda otra que disfrutar de este sentimiento tan pleno que me está llenando el corazón...

¿Por qué tanta alegría? simplemente porque sí, porque a veces es bueno repensar las cosas y buscarle el lado bueno a todo lo que nos pasa. Cuando terminó el 2007 escuché a muchas personas quejarse de lo terrible que había sido el último año… cada uno con su cuento… cada uno con sus propios problemas. Lo bueno es que todos ellos le daban la bienvenida al 2008 con la esperanza de que fuera mejor que el anterior. Y, por supuesto, me uno a ellos.

El 2007 pasó con más penas que alegrías, pero no creo que sea necesario hacer una recapitulación de los malos momentos, más bien prefiero rescatar lo bueno. Desde haber reprobado un ramo hasta haberme desilusionado de un amor me hicieron encontrar en mi familia el apoyo que andaba buscando hace años. Creo que por primera vez me cobijé en ellos, y aprendí que en las buenas y en las malas, ellos siempre estarán ahí.

La cosa es que creo, más bien, estoy segura de que este año será mucho mejor… al menos tengo las ganas de mejorar...